Aclara Salud que jamás ha sido rebasado el sistema hospitalario durante la pandemia

Redacción / TVT
A pesar de la crisis sanitaria causada por el COVID-19 en todo el mundo, el sector salud de Tabasco y su capacidad hospitalaria, en ningún momento se vieron rebasados en la atención a pacientes con Coronavirus, afirmó la secretaria de Salud, Silvia Guillermina Roldán Fernández.
Durante su comparecencia ante el pleno legislativo local con motivo de la Glosa del Segundo Informe de gobierno, explicó que al corte del pasado 1 de diciembre, en la entidad se habían presentado 37 mil 305 casos, de los cuales el 88.5 por ciento de los pacientes se han recuperado y fallecieron tres mil 134 personas que representan un 8.4 del total casos positivos.
Detalló que ante la contingencia sanitaria el sector salud de Tabasco, trabajo en la recuperación de diversas áreas hospitalarias, así como en la reconversión de 20 hospitales para la atención de pacientes de COVID-19 y se garantizó el acceso a la población al diagnóstico oportuno del coronavirus a través del muestreo, donde se hicieron 88 mil 535 pruebas, teniendo con ello Tabasco una de las tasas más altas de muestreo del país.
“Inicialmente fueron reconvertidas 506 camas para pacientes COVID-19 en el mes de febrero… alcanzando en el mes de septiembre las 1,056 camas hospitalarias, representando un incremento del 109%. Si bien el papel de toda la red hospitalaria COVID ha sido fundamental en el manejo de los pacientes críticos… debo destacar el trabajo realizado por Hospital Regional de Alta Especialidad “Dr. Juan Graham Casasús” que se convirtió a la postre en referencia en el manejo médico de todos nuestros pacientes y ha sido ejemplo nacional”, dijo.
Indicó que hasta el 1 de diciembre se habían atendido y hospitalizado por Coronavirus a 12 mil 310 pacientes y enfatizó el trabajo realizado con brigadas para contener, con visitas domiciliares, los contagios de COVID-19.
Así mismo dijo que en el sector salud se buscó el blindaje para la atención de las urgencias médicas y para el manejo de aquellos pacientes crónicos que por su condición, no deben interrumpir su tratamiento, tales como los pacientes con cáncer, especialmente los niños, a los pacientes con insuficiencia renal que requieren de diálisis y hemodiálisis, algunas cardiopatías y otros procedimientos indispensables.