Redacción / TVT

Después del análisis de muestras de microorganismos marinos y de la abundante materia orgánica como manglares, hojas, troncos y basura, se determinó que la espuma marina que se originó en la villa de Sánchez Magallanes, Cárdenas, el pasado 13 de noviembre, se debió a los fuertes vientos que causaron los frentes fríos en esta parte de la zona costera.

El biólogo Arturo Garrido Mora, encargado del laboratorio de la División Académica de Ciencias Biológicas de la UJAT, explico que este fenómeno no es producto de alguna contaminación, por lo tanto no es tóxica y la calidad del agua se tornó normal por lo que se descarta daño alguno a la población.

Precisó que se evaluaron metales pesados, pruebas coliformes y medidas de factores de datos básicos y el agua no representó ningún indicio de contaminación fuera de lo normal.